Vía de la Plata: Etapa 23

Partimos de Montamarta rumbo al embalse de Ricobayo, presido desde lo alto la ermita de la Virgen del Castillo. Siguiendo la antigua y desgraciadamente cubierta calzada romana avanzaremos hasta un viaducto, pasando por debajo de él y llegando a dicho embalse, aproximadamente a seis kilómetros desde nuestra partida. No llegaremos a bajar hasta él sino que justo tras pasar por una casa coger la senda a su vera,pudiendo poco a poco ir observando la cercana nacional que pasa sobre el embalse. En este punto podemos desviarnos hacia la carretera, cruzar sobre un puente y desviarnos luego hacia la izquierda. Después no tendremos otra alternativa que descender hacia el embalse, ascendiendo a continuación hasta los restos del castillo de Castrotorafe, declarado Bien de Interés Cultural y alrededor del cual existió una ciudad con mucha importancia para el Imperio romano. El trazado se aproxima pero no pasa directamente por él, pero sin duda el desvío merece la pena.

A escasos tres kilómetros llegamos a Fontanillas de Castro, pequeña localidad donde podremos hacer un alto para tomar algo en alguno de sus establecimientos. Seguimos en trazado por un camino que se abre a mano derecha, conduciéndonos este directamente a Riego del Camino, población que cuenta con albergue de peregrinos.

Las obras de la cercana autovía pueden haber borrado alguna indicación jacobea, pero no debemos de preocuparnos y seguir en todo momento el sendero marcado de la carretera nacional, siempre dejándola a mano derecha. A las afueras ya de Granja de Moreruela pasaremos por la carretera que lleva al monasterio cisterciense de Moreruela, uno de los primeros de este tipo edificados en la Península Ibérica. El centro urbano se encuentra un poco más adelante, accediendo a él por la calle José Rodríguez Joaquín y desembocando finalmente en la nacional, que de tanta ayuda nos ha servido en el día de hoy.

Aquí será donde nos encontraremos con los compañeros del Camino Sanabrés, los cuales inician aquí su aventura y que nos acompañarán a partir de ahora si optamos por seguir hasta Tábara.

No olvides tener en cuenta:

Desgraciadamente esta etapa está marcada por la presencia de las obras recientes de la autovía, la cual ha afectado considerablemente el entorno.

Desde Montamarta existe la posibilidad de desviarse por la carretera nacional hasta Tábara, enlazando allí con el resto de peregrinos que están realizando el Camino Sanabrés. Cabe resaltar que todo este tramo será por el arcén de la carretera. Esta etapa no supone dificultades añadidas para ciclistas o personas con movilidad reducida.