Camino Sanabrés: Etapa 13

Desde Outeiro salimos a una pista entre los montes de Vedra que recorreremos durante aproximadamente unos dos kilómetros siempre siguiendo recto. Al llegar a un camino asfaltado y junto a un cruceiro entramos en el concello de Boqueixón, en la parroquia de Lestedo. Giramos a la derecha sobre asfalto y a continuación otra vez en la misma dirección, siguiendo la concha de un mojón hasta Rubial.

En esta localidad pasaremos por delante de un pazo y otro cruceiro, justo al pasarlo torcemos a la izquierda en busca de una carretera que cruzamos y seguimos durante los siguientes metros. Llegado un punto salvaremos las vías del tren por un paso habilitado para ello y más adelante por otro puente para acceder a Sergude. El trazado da un ligero rodeo desde aquí, ya que a la altura de un cruce debemos torcer a la izquierda y tras unos ciento cincuenta metros volvemos a girar a la derecha hacia el lugar de A Gándara, dándole la espalda al pico Sacro, uno de los más famosos de toda la comunidad gallega. Existen leyendas sobre él desde tiempos inmemoriales, destacando la que narra cómo este lugar fue el que acogió la primera sepultura del Apóstol Santiago. Siguiendo las flechas amarillas y cruzando por varias intersecciones alcanzamos la AC-960, donde continuamos a la izquierda en busca de la nacional en este caso, en el lugar de A Susana. Tras unos giros llegamos a un merendero, en cuyas proximidades cruzamos bajo la N-525 y salvamos posteriormente un arroyo. Desde aquí seguimos a la izquierda por un camino ascendente, teniendo que desviarnos otra vez un poco más arriba a mano derecha hacia el lugar de Cañoteira de Marrozos. Otra vez salvamos el escollo de la vía del tren sobre un puente y a la izquierda comenzamos a descender abruptamente. En pleno repecho giramos primero a la derecha y luego a la izquierda cruzando una vez más las vías y acceder al fin a Vixoi, ya perteneciente al ayuntamiento de Santiago de Compostela. Aquí podremos hacer una pequeña pausa en la ermita de Santa Lucia para seguir a continuación por Piñeiro, pasar bajo la autopista y sobre las vías del tren, justo en el lugar de Angrois, fatídicamente conocido por el grave accidente ferroviario de 2013. Ya en esta localidad seguimos por un camino empedrado, conocido como la calzada del Sar, pudiendo apreciar a lo lejos los picos de la Catedral, iinyectándonos ánimos para continuar. Por a Ponte do Sar subimos por la rúa do Sar y luego por la de Castron Douro, siempre en pendiente positiva. Lo bueno se hace esperar! Accedemos al núcleo histórico por la única puerta que se conserva hoy en día de la antigua muralla: a Porta de Mazarelos. Desde aquí llegamos rápidamente a la plaza de la Universidad y la calle de Caldeirería, donde nos desviamos a la izquierda por la de Xelmírez y en la famosa praza de Praterías, que debe su nombre a la existencia histórica de numerosos talleres de orfebrería desde la Edad Media. Ante nosotros se alza la majestuosa Catedral de Santiago de Compostela donde se nos olvidará todo el cansancio acumulado y una sonrisa se nos dibujará en el rostro por haber conseguido finalizar el Camino con éxito.

No olvides tener en cuenta:

El escaso kilometraje de esta etapa permitirá a los peregrinos disfrutar tranquilamente de una tarde por las callejuelas de Santiago. Lo malo es que como el acceso a todas las grandes ciudades lo haremos por urbanizaciones y zonas industrializadas algo monótonas.