Pazo de Raxoi

Las actuales dependencias municipales se encuentran en el interior de este grandioso palacio de Raxoi, edificado en 1766 por el arquitecto Carlos Lemaur siguiendo un estilo neoclásico.

Se encuentra en la parte occidental de la plaza del Obradoiro, frente a la fachada de la Catedral de Santiago. A su derecha se encuentra el Colegio de San Gerónimo, que hoy ejerce como sede del Rectorado de la Universidad de Santiago. A su izquierda está el Hostal de Los Reyes Católicos, antiguo hospital de peregrinos, que desde 1954 es Parador Nacional.

El solar sobre el cual se yergue el Pazo de Raxoi estaba ocupado anteriormente por las cárceles civil y eclesiástica así como por un tramo de la muralla de la ciudad. Tras proponer varios proyectos, se decidió que en el edificio albergase el Consistorio Compostelano, el Seminario de Confesores y las cárceles. Según lo que se lee en el friso del edificio, las obras tuvieron lugar entre 1766 y 1772.

El pazo contribuyó a realzar la Plaza del Obradoiro, que carecía de un edificio monumental en ese lado cuando ya se habían terminado las obras de la fachada de la catedral.

La fachada principal tiene una marcada horizontalidad, ya que recorre 90 metros de largo en la plaza, estando dividida en tres cuerpos principales y dos intermedios. En el central podemos ver en el nivel intermedio unas seis colosales columnas de orden jónico y en el superior un frontón triangular sobre el que se apoya la figura de Santiago Matamoros coronando el edificio. La escultura fue diseñada por el gallego Gregorio Ferro y realizada en mármol por los escultores José Gambino y José Ferreiro. En ambos lados podemos ver otros cuerpos de columnas que sujetan frontones semicirculares. En el nivel inferior vemos unos soportales con cinco arquerías adinteladas en el centro y diez arcos de medio punto a cada lado.

La parte trasera de la edificación tiene un aspecto muy distinto por varios factores. Para empezar, el profundo salto de nivel del terreno y la inmediación a la iglesia de San Fructuoso exigía soluciones distintas. El primer cuerpo, hasta la altura de la plaza del Obradoiro estaba destinado para las cárceles. Se planifica un gran patio central y se levantan dos cuerpos prismáticos a los lados, con los mismos esquemas que en la fachada pero careciendo de elementos que rompiesen la composición, exceptuando la balaustrada.

El edificio cumplió varias funciones a lo largo de sus casi cuatro siglos de historia. Por una parte sirvió de casa consistorial y hogar de los confesores que daban penitencia a los peregrinos. Además, hasta la mitad del siglo XX funcionó como cárcel, antes de pasar a ser residencia de canónigos. Actualmente es la sede del Ayuntamiento de Santiago.

No es visitable ya que se reserva para uso administrativo.