El Colegio de San Jerónimo (de San Xerome en gallego) es un edificio del siglo XVII situado en el centro histórico de la ciudad de Santiago de Compostela. Concretamente se alza en la plaza más emblemática de la ciudad, la del Obradoiro, que la cierra por el lado sur. También es conocido por el Colegio de los Artistas y actualmente es la sede del rectorado de la Universidad de Santiago de Compostela.

Fue un colegio mayor fundado por el arzobispo compostelano Alonso III de Fonseca, con el objetivo de ser un colegio para estudiantes pobres y artistas. Inicialmente fue instalado en el llamado Hospicio de la Azabachería y dependía del Colegio de Santiago Alfeo.

Durante el siglo XVII, concretamente en el año 1652, se decidió su traslado a su localización actual, en la llamada entonces llamada Plaza del Hospital (por situarse en ella el Hostal de los Reyes Católicos) actualmente, Plaza del Obradoiro. Hasta hace pocos años, su autoría era atribuida al arquitecto Bartolomé Fernández de Lechuga y el claustro al prestigiado José la Peña Toro, pero más tarde se descubrió que que estos no pudieron ser sus artífices, permaneciendo por lo tanto sin identificar en la actualidad. 

El Colegio, que pierde su estatus de Colegio Mayor en 1840, tenía un vicerrector y tres profesores. Durante gran parte del siglo XX fue sede de la Escuela General de Magisterio hasta que en el año 1980 se establece aquí el rectorado de la Universidad.

En el edificio, de líneas puras con apenas dos pisos de altura, fue recolocado el antiguo pórtico medieval del Hospicio de Azabachería, donde antes funcionaba el colegio. Este elemento fue interpretado erróneamente en el pasado como señal de una larga permanencia de hábitos constructivos antiguos de los maestres gallegos y del enraizamiento del arte románico en Galicia. El pórtico presenta en su parte izquierda y de dentro para fuera, las figuras de Santiago Apóstol, San Juan y San Francisco. A la derecha, en el mismo orden, San Pedro, San Pablo y Santo Domingo. En el tímpano se encuentra la figura de la Inmaculada, flanqueada por Santa Margarita y Santa Catalina. En la arquivolta, la Virgen con el Niño en el centro, rodeada por figuras de santos y santas.