Camino del Norte: Etapa 25

Dejamos atrás Luarca por la calle La Peña, cruzando el curso del río Negro y ascendiendo hasta la aldea de Villuir, punto donde cruzamos la carretera nacional y nos adentramos por caminos rurales hasta Otur, a unos tres kilómetros. Como en la jornada anterior iremos alternando senderos paralelos a la N-634 y la propia carretera. El trazado no discurre por su centro urbano sino que la rodea por su parte más alta. Pero si queremos visitar la iglesia parroquial o la casa indiana de Villa Rosita existe un desvío hacia el pueblo. Continuamos siguiendo las flechas amarillas sin perder de vista el asfalto de la nacional pasando por los barrios de Vilapedre y Piñera, ya en el concejo de Navia. Entre medias tendremos que cruzar de nuevo la calzada, las vías ferroviarias por un paso subterráneo y un pequeño arroyo. Salvo que deseemos pernoctar en esta última parroquia debemos continuar por los núcleos de Villaoril, La Colorada y Navia. Ya en el centro de la capital del concejo debemos ir en busca del río Navia, el cual cruzamos para continuar nuestra ruta en busca de Jarrio siguiendo la segunda calle ascendente. Una Cruz de Santiago nos alentará para seguir caminando mostrándonos que vamos por el camino correcto.

Justo en la salida de esta localidad debemos seguir la carretera de frente, alternando en los últimos kilómetros que restan para alcanzar Cartavio esta vía y caminos paralelos a ella que nos permitirán descansar momentaneamente del tráfico y del asfalto. Apenas unos tres kilómetros y medio nos separan de nuestro objetivo: La Caridad, parroquia y capital del concejo de El Franco donde al fin poder relajarnos y descansar nuestros doloridos pies en la pedregosa playa de Pormenande o en el area recreativa anexa al albergue de peregrinos.

No olvides tener en cuenta:

Este tipo de etapas pueden resultar algo monótonas dada la cantidad de kilómetros sobre asfalto. Además, el caminar por la carretera nacional e incluso por vías secundarias siempre alberga riesgos. No olvides circular con precaución por el arcén, siempre con un ojo puesto en el tráfico, y con elementos reflectantes si viajas en invierno, por la noche, o en zonas con poca visibilidad. Esta etapa no supone dificultades añadidas para ciclistas o personas con movilidad reducida.